El cuidador: un nuevo miembro en la familia

A día de hoy, cuidado de nuestros mayores es un de los asuntos mas importantes. En la actualidad en la mayoría de las familias trabajan todos los miembros, resultando imposible encargarse de los cuidados de sus mayores. También son comunes aquellas que no pueden optar a llevar a sus familiares a una residencia, ya sea a por nivel económico o porque la persona se niega a abandonar su casa o a apartarse de su entorno. En ese proceso el cuidador se convierte en la única opción, pasando a ser la persona que lo ayuda y acompaña sin tener que realizar grandes cambios que afecten su vida cotidiana

Funciones del cuidador

• Vela por la integridad física y psíquica de su paciente
• Le brinda una compañía
• Le hace sentir seguro ante los retos diarios
• Se encarga de sus medicinas, del aseo, de realizar actividades con él. En definitiva se convierte en un una parte apoyo imprescindible en su día a día.

A veces la adaptación es difícil, pero con una buena comunicación entre los familiares, el paciente y su cuidador, se forma un vinculo afectivo fuerte, en el que el cuidador acaba formando parte del núcleo familiar.

Esta relación profesional-usuario es muy intensa, ya que pasan prácticamente todos su tiempo juntos y comparten muchos momentos que, sin olvidar la profesionalidad y el trabajo que implica, generan un factor sentimental que puede desembocar en una bonita amistad.

Es importante ya que va a ser parte de la vida de la persona incluirlo en su vida y crear lazos para que exista una convivencia.

Según los últimos datos el 80% de los cuidadores, sufren de alguna dolencia o lesión a causa del duro trabajo que deben desempeñar, sin embargo, siguen ahí con la mejor actitud, brindando todo el cariño que necesitan.

Por eso desde electium agradecemos su labor y todo el esfuerzo y dedicación hacia ellos, y aunque el 5 de noviembre se celebra su día, consideramos que todos los días tenemos que estar agradecidos, por cuidar y proteger a nuestros mayores, facilitándole las rutinas cotidianas y dándonos la tranquilidad de que aunque no estemos, ellos están bien cuidados y atendidos.